Pasó la guerra entre Vilna y Varsovia, trabajando en
bibliotecas y sin tomar parte en las actividades bélicas, aunque sí
escribió poesía de tono patriótico que publicó con seudónimo. Finalizada
la contienda, aceptó el puesto de agregado cultural en la embajada de
Washington (1945) y más tarde en la de París (1951), ciudad en la que se
exilió ese mismo año; allí apareció El pensamiento cautivo
(1953), libro que pretende explicar al mundo las condiciones en las que
se desarrolló la creación en la Polonia comunista y que tuvo gran
repercusión internacional.
En 1960 se trasladó a
Berkeley, donde fijó definitivamente su residencia e impartió clases de
literatura polaca en la Universidad de California. La concesión del
Nobel representó el reconocimiento internacional de su obra, pero
también de la muy abundante literatura polaca del exilio.
La
obra literaria de Czeslaw Milosz se extiende al ámbito del ensayo y la
novela, pero es sobre todo la poesía el género en el que destaca su
genio y con el que ejerce una influencia mayor en la literatura polaca,
al tiempo que expresa para el mundo su vivencia del duro y
contradictorio período que le ha tocado vivir. Durante el período de
residencia en París escribió y publicó dos entregas poéticas, Luz del día (1953) y El rey Popiel y otros poemas (1962), que tendrían continuación en su período norteamericano con Pepito encantado (1964), Ciudad sin nombre (1969), Donde el sol sale y se oculta (1974), Himno sobre la perla (1983), Crónicas (1987), Poemas (1987) y Regiones lejanas (1991).
Su poesía, como toda su obra literaria, es la de un
escritor que es testigo de su tiempo, y esto le convierte en un
paradigma de una época, de alguien situado al margen de conmociones y
aventuras, que no tiene, por tanto, avatar ninguno que contar acerca de
su propia vida, sino que expresa precisamente, sin aspavientos, la
existencia del hombre característico del siglo XX, el ser anónimo de las
grandes ciudades, carente de heroicidad, que sobrevive, produce, se
reproduce y en todo ello encuentra suficiente razón para la existencia,
integrando religión y ser social, patriotismo y esperanzada confianza en
el ser humano.
Esta actitud será ásperamente
criticada por algunos de sus compatriotas, sobre todo por Z. Herbert,
quien lo acusa de carecer de norte y de convicciones. Entre sus obras
narrativas se cuentan El poder cambia de manos (1953), de corte político, y El valle de Issa
(1955), libro de recuerdos de su infancia y adolescencia sobre el fondo
de una Lituania fantástica. De su amplia producción ensayística merece
un particular relieve El pensamiento cautivo (1953), obra que trata sobre la mentalidad del intelectual bajo el estalinismo, y Otra Europa (1959), especie de guía en el filo de la biografía de la realidad histórico-cultural polaca y de la Europa centro-oriental.
ポーランドで自主管理労組《連帯》の活動が盛り上がりを見せる1980年、亡命先のアメリカ合州国でノーベル文学賞を受賞し、一躍世界に名を知られることとなりました。Ernesto Mr. T にとっては つい昨日の出来事のように思えます。