1989年の今日、2月14日、イランのホメイニが、イギリスの作家ルシュディの小説『悪魔の詩』がイスラムを暴涜しているとして、著者や翻訳者・出版関係者に死刑を宣告しました。
それから数ヶ月後にホメイニ本人は心臓発作で亡くなったのですが、fatwa というものは発した本人以外撤回不可能なため、永遠に撤回できなくなってしまったのです。
この拙ブログにも昨年の7月11日に The Satanic Verses 訳者の死 から21年 という題で邦訳者、五十嵐一(ひとし)氏(下掲写真・享年44歳)が22年前に暗殺されたことを載せましたが、その掲載から2カ月後の昨年2012年の9月には処刑実行者に対する懸賞金が50万ドル増額され330万ドル(本日換算で3億円超)となったとの報道さえありました。
Controversia sobre Los versos satánicos
La publicación de Los versos satánicos, en septiembre de 1988, provocó una controversia inmediata en el mundo musulmán debido a la supuesta irreverencia con que se trata a la figura del profeta Mahoma. India prohibió el libro el 5 de octubre, y Sudáfrica el 24 de noviembre. Al cabo de varias semanas, Pakistán, Arabia Saudita, Egipto, Somalia, Bangladés, Sudán, Malasia, Indonesia y Catar también habían prohibido la novela. El 12 de febrero de 1989, cinco personas fueron abatidas por los disparos de la policía durante una protesta contra el libro en Islamabad.
El 14 de febrero de 1989, un edicto religioso, o fatwa, instando a su ejecución fue leído en Radio Teherán por el ayatolá Ruhollah Jomeiní, líder religioso de Irán. El edicto acusaba al libro de "blasfemo contra el Islam". Además, Jomeiní acusó a Rushdie del pecado de "apostasía", el abandono de la fe islámica que según los ahadiz, o tradiciones del profeta, debe castigarse con la muerte. La acusación de apostasía se debió a que Rushdie a través de la novela afirmaba no creer ya en el Islam. Jomeiní hizo un llamamiento a la ejecución del escritor, y también a la ejecución de aquellos editores que publicaran el libro conociendo sus contenidos.
El 24 de febrero, Jomeiní ofreció una recompensa de tres millones de dólares estadounidenses por la muerte de Rushdie. Rushdie pasaría años viviendo escondido bajo protección británica.
En los meses siguientes, se produjeron numerosas protestas contra el libro, incluidas quemas de librerías y protestas frente a embajadas británicas. En 1991, Igarashi Hitoshi, traductor de la obra al japonés, fue asesinado en Tokio, y el traductor italiano fue golpeado y apuñalado en Milán. En 1993, el editor noruego de Rushdie, William Nygaard, tiroteado frente a su casa en Oslo, resultó gravemente herido. 37 personas murieron en un hotel en Sivas, en Turquía, al ser quemadas por manifestantes que protestaban contra Aziz Nesin, traductor de Rushdie al turco.
El músico Yusuf Islam (Cat Stevens), se expresó públicamente a favor de la fatwa en una entrevista en la televisión británica, aunque más tarde se descubrió que había sido cogido por sorpresa y que los medios, de una manera tendenciosa, desnaturalizaron el sentido de sus palabras. Un poco después hizo un comunicado donde dejaba muy claro que, aunque detestaba el contenido del libro, no estaba de acuerdo con la fatwa, diciendo: «Según la ley del islam, los musulmanes deben ceñirse a las leyes de los países donde tengan residencia».
En 1990, Rushdie publicó un ensayo titulado In Good Faith (De buena fe) para tranquilizar a sus críticos y afirmó su respeto por el Islam. A pesar de esto, las autoridades religiosas iraníes no anularon la fatwa y aunque ha hecho más declaraciones públicas defendiendo su libro al tiempo que niega que este insulte al Islam, muchos musulmanes aún consideran válido el edicto contra Rushdie.
En 1997, la recompensa fue doblada, y al año siguiente el fiscal general del estado iraní ratificó su apoyo.
En 1998, el gobierno iraní se comprometió públicamente a no buscar la ejecución de Rushdie. Esto ocurrió en el marco de un acuerdo más amplio entre Irán y el Reino Unido para normalizar las relaciones entre los dos países. Posteriormente, Rushdie declaró que dejaría de vivir oculto. También declaró que estaba arrepentido de haber llegado a afirmar ser musulmán practicante para tranquilizar los ánimos cuando, en realidad, no cree en el Islam ni en la religión.
A pesar de que Irán ya no busca la ejecución de la fatwa, esta solo podría haber sido revocada por la persona que la emitió, Jomeiní, fallecido en 1989. Por ello, aún hoy en día algunos grupos fundamentalistas consideran que sigue siendo válida independientemente de la postura del gobierno iraní.
En enero de 2012 se vio obligado a cancelar su participación en el Festival de Literatura de Jaipur (India), el mayor de Asia, después de que "fuentes de la inteligencia" de los estados de Maharashtra y Rajasthan le informaran que se había "pagado a dos asesinos de los bajos fondos" de Bombay para eliminarlo. Y aunque el escritor expresó "ciertas dudas" en cuanto a la precisión de la información, explicó que acudir al festival en esas circunstancias "sería irresponsable para mi familia, para la audiencia del festival y para mis compañeros escritores". Algunos líderes musulmanes habían pedido al Gobierno indio que no le permitiera entrar en el país, donde Los versos satánicos siguen prohibidos todavía.